En un partido vital por la séptima fecha de la liga, el Deportivo Cali se impuso 3-1 a Unión Magdalena en su estadio, consiguiendo un triunfo muy importante que lo mete de nuevo en el grupo de los ocho.
El juego comenzó con un Cali que tomó la delantera rápidamente. Una falta sobre Luis Manuel Orejuela resultó en un penal, y Andrey Estupiñán lo convirtió con un cobro impecable para el 1-0.
A pesar de la ventaja, el equipo visitante tomó la posesión del balón, aunque sin generar mayor peligro.
El Cali, por su parte, se veía incómodo y sin ideas claras en ataque, un reflejo del mal partido del delantero uruguayo Fernando Mimbacas, quien además salió en el entretiempo para ser reemplazado por Jaider Moreno. A esto se sumó la salida por lesión de Andrés Colorado.
El segundo tiempo trajo la contundencia que el Cali necesitaba. Johan Martínez se convirtió en la figura del partido al marcar dos golazos de larga distancia. El primero, justo al iniciar la segunda mitad, y el segundo, un remate que se metió en el ángulo para el 3-0. Con esta actuación, Martínez demuestra un gran nivel, sumando tres goles en los últimos dos partidos.
Con una ventaja cómoda, el Cali bajó el ritmo, lo que permitió a Unión Magdalena encontrar más espacios. Sin embargo, el arquero Alejandro Rodríguez se lució con varias atajadas espectaculares, salvando su portería en tres ocasiones. A pesar de su destacada actuación, un penal a favor de los visitantes fue convertido por Ricardo «El Caballo» Márquez, sellando el 3-1 final.
El triunfo del Cali fue merecido, mostrando una notable mejoría en el ataque, especialmente con el gran rendimiento de Johan Martínez y Alejandro Rodríguez. No obstante, aún hay aspectos defensivos por corregir. Por su parte, Unión Magdalena reaccionó demasiado tarde y el resultado lo deja en una situación muy comprometida en la tabla del descenso.